FRASE CELEBRE

"Sin importar el tamaño de la ciudad o pueblo en donde nacen los hombres o las mujeres, ellos son del tamaño de su obra, del tamaño de su voluntad de engrandecer y enriquecer a sus hermanos".



Ignacio Allende.



miércoles, 22 de junio de 2011

NARRACION FICTICIA SOBRE ALGUN ELEMENTO PRESENTE EN LA INFORMACIÓN

ACTIVIDAD 9:




         Francisco I. Madero descrito en la perspectiva espiritual donde los valores son los alcances de los hombres formados en la armonía. Los ideales hacen conjunción en los valores y en pulirlos en esa omnipotencia de la fuerza que va más allá de la presencia terrenal y de convocarlos a reconocerse en la hermandad sin ambiciones de poder, alejadas de toda maldad y cercanas por el bien de la humanidad. Esta figura que promulga un movimiento democrático para alcanzar la libertad, contrasta con el contexto impregnado de la barbarie por la lucha del poder. La caracterización que conjuga al político y su misticismo en un sueño de formar a la nación, se deja ver en la narrativa: el dibujo del revolucionario de la democracia y, el sueño quebrantado del político.
           Se le puede llegar a definir  a Madero, en su proyección política en su rasgo del que “no deseó el poder por ambición personal, sino para imponer las ideas que lo animaban”. Educado en un ambiente religioso el principio de amor impregnó esa idea de lograr el bien de todos, la violencia no era su comunión, el enemigo ya vencido es un hermano. En sí, estaba convencido que la lucha por alcanzar lo justo, es encontrar en los vencedores el sentido de respeto y amor para lograr la armonía y el bien. Este principio lleva a su figura de político la singularidad de un caballero que en su palabra de político tiene el compromiso de cumplir, que su inocencia no lo hace ver al enemigo, en sí, avala el otro desde su conducta ejemplar. Este es el nacer del llamado El Apóstol.


        Madero, es el revolucionario de la democracia, el impulsor de la libertad y el gobernar en lo constitucional, reafirmando su intencionalidad de promover la batalla para logar la paz fundada en la libertad. El concepto de gobierno es planteado en la credibilidad del bien, el respeto y la democracia de quien gobierna en su propósito de ejecutar los derechos constitucionales y, hacerlos factibles en la configuración de la ciudadanía. La respuesta a esa violencia imperante fue la batalla a la presidencia en comicios donde el pueblo es quien tuviera la decisión.
              Libertad, democracia e igualdad es el llamado a una ciudadanía todavía muy distante, pero ya creada en el sueño de Madero.


          El sueño de este político es planteado en una secuencia de acciones convencido de lograr el éxito: convocó a una contienda política de partido para que en ello se restaurara los principios republicanos; él de los principios de no reelección y sufragio efectivo; él que consideró que derrocado el dictador, las fuerzas revolucionarias licenciadas y un gobierno interino se iría por el camino de la democracia, del ejercicio constitucional y lo legal; el error lo tejió con seguridad, considerar que el trato de iguales a los vencidos era un trato de caballeros en la política.
         Hasta dónde llegaba el sueño de Madero, cuáles eran sus lecciones cívicas que él contemplaba, era acaso ese recibimiento del pueblo y la euforia de sentirse abrazado por miles de manos que lo aclamaban como libertador del régimen despiadado de Porfirio
Díaz.                                                                                                                                                                               
         Un político que habla con la verdad, que pacta como caballero, que no le atrae las adulaciones y considera que el poder no es magnificar lo individual, sino humanizar la política, donde el corazón le dé nutrientes para luchar por el bien de todos, el creyente en elecciones libres, en la libertad como esencia de la democracia, eso es creación de un sueño. Así la figura de Madero resplandece en ese paisaje político donde la batalla se define en el extremo de las traiciones y el olvido de un gobierno constitucional. Su muerte marcó esa definición de política y el poder,  ¿queremos otro Madero en la presidencia? ¿Otro mártir? ¿Otro ingenuo en política? ¿Otro místico? La ingenuidad y el respeto a lo pactado no es naturaleza del juego político, o su batalla era en una sociedad, que no estaba configurada con ciudadanos, y esto es premisa para reconocer sus derechos y delimitar sus intereses, lo que es considerable es su revolución política y sus fines para despertar la conciencia política que forma ciudadanos.



FRANCISCO I. MADERO, EL SOÑADOR DE UN MUNDO JUSTO CON LIBERTAD E IGUALDAD.

Francisco Ignacio Madero González fue un empresario y político mexicano originario de Parras, Coahuila. Fue elegido presidente de México al triunfo de la revolución de 1910. Fue asesinado junto con el vicepresidente José Mariano Pino Suarez a causa del golpe de estado originado por Victoriano Huerta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario